Un británico casi se estrella al intentar acortar la diferencia con los medallistas de oro en la final masculina

La emoción en el velódromo de los Juegos Olímpicos de París aumentó en intensidad en las últimas vueltas de la final por la medalla de oro en persecución por equipos masculina, mientras el cuarto de Gran Bretaña luchaba con sus rivales australianos.

A falta de dos vueltas para el final, Gran Bretaña se encontraba a dos décimas de segundo y aceleraba por detrás del potente piloto Ethan Hayter, cuando este estuvo a punto de estrellarse debido al dolor de su último esfuerzo. Los dos equipos se han llevado al límite y Gran Bretaña ha estallado en una intensa batalla que ha puesto a prueba a todos.