El francés inicia un nuevo capítulo, posiblemente el último, de su carrera tras una década en Soudal-QuickStep

Julian Alaphilippe ha recuperado su sonrisa traviesa y, al comenzar su etapa en Tudor Pro Cycling, está convencido de que su estilo de carrera naturalmente agresivo siempre puede superar la tendencia moderna de competir en función de los vatios y los datos de rendimiento.

“El garbo y la agresión siempre pueden vencer a las cifras de poder. De lo contrario, ya no estaría aquí”, explicó Alaphillipe en España en el Tudor Media Day.