El aspirante del Movistar a la general deja caer a Primož Roglič en la temible subida a Hazallanas
En el rápido descenso final de la etapa 9 de la Vuelta a España, Enric Mas (Movistar) estuvo a punto de sufrir un importante accidente cuando el viento en contra atrapó su bicicleta y el contendiente español por la general prácticamente se salió de la pista.
En un momento estremecedor para los televidentes, las cámaras mostraron cómo Mas se tambaleaba espectacularmente hacia su derecha y parecía que se iba a caer.
Pero por suerte, el repentino distanciamiento de las continuas barreras de protección que discurrían paralelas a la carretera que bajaba por la ladera de la montaña permitió que el corredor de Movistar tuviera el espacio necesario para recuperar el control de su bicicleta.
Cincuenta metros antes o después de ese punto del descenso, Mas habría tenido que sufrir una caída a gran velocidad, pero en lugar de ello pudo continuar con una escapada iniciada en el Alto de Hazallanas, que le permitió ganar casi un minuto al máximo favorito de la general, Primoz Roglič (Red Bull-Bora-Hansgrohe).
Tres veces subcampeón en la Vuelta a España y segundo el día anterior en Cazorla, Mas fue finalmente alcanzado por el grupo de Roglič cerca de la meta en Granada. Pero aunque después dijo que el accidente parecía peor de lo que realmente fue, reconoció que había tenido mucha suerte y que su estado sigue siendo un buen augurio para el resto de la Vuelta.
“Creo que en la televisión parecía más aterrador de lo que realmente fue, básicamente el viento me sacó del camino”, dijo Mas a los periodistas después de la etapa 9.
“Pero menos mal que no me caí y que había un espacio extra con grava al lado de la carretera, porque habría sido un accidente muy feo. No sé si fue por la carretera o por el viento, pero en general pasé algunos momentos de miedo en los descensos, sobre todo cuando iba solo en cabeza.
“En esa ocasión en particular quise cambiar de trayectoria y me salí del camino. Menos mal que había un trozo de grava ahí. Me alegro mucho de no haberme caído”.
En cualquier caso, Mas reconoce que su Vuelta va bien hasta ahora. Pudo seguir a Roglič tanto en la cuarta etapa en Villuercas como en la segunda llegada en alto en Cazorla, y actualmente marcha cuarto en la general, a 4:35 del líder de la carrera, Ben O'Conner (Decathlon AG2R La Mondiale).
“Me quedo con las sensaciones, más que con cualquier otra cosa”, dijo Mas sobre su capacidad sin precedentes para dejar atrás a Roglič en una etapa de montaña de la Vuelta. “Al final, mi maniobra fue más interesante como espectáculo que por ganar tiempo, aunque si hoy hubiéramos tenido un final en alto, la historia habría sido diferente. Sólo espero que en finales como en Lagos de Covadonga las cosas funcionen de otra manera”.
Mas reconoció que con tantos cambios en la narrativa de la Vuelta a España de este año, la carrera estaba muy abierta hasta ahora y fue, argumentó, “mucho más interesante que el Tour de Francia”.
“Comencé el día con el objetivo de atacar pero no sabía si ir a por ello en la primera o en la segunda vuelta por Hazallanas”, dijo.
“Cuando vi que había un momento de debilidad (en el pelotón de favoritos), me lancé a por ello. Pero el más fuerte en las subidas de hoy fue (el ganador de la etapa) Adam Yates”.