El final de la etapa del sábado se traslada de Auron a Madone d’Utelle

Las previsiones que anunciaban fuertes posibilidades de nieve en Auron, sede de la séptima etapa París-Niza el sábado, han llevado a los organizadores ASO a acortar la etapa y trasladar la llegada al sur, a la Madone d’Utelle.

La organización hizo el anuncio el jueves, afirmando que la decisión se había tomado “debido a las condiciones meteorológicas desfavorables en el departamento de Alpes Marítimos y según las previsiones meteorológicas para el fin de semana, y con el fin de garantizar la seguridad de los corredores.

La carrera “, de acuerdo con la ciudad de Niza, la Metropole de Niza Costa Azul, la Prefectura de los Alpes Marítimos y previa consulta al colegio de comisarios de la Unión Ciclista Internacional (UCI), a los representantes de los equipos y a los corredores (AIGCP , CPA), han decidido modificar el recorrido de la etapa 7”, prosigue.

La ruta París-Niza 2024 para la penúltima etapa debía tener 173 kilómetros de longitud, comenzando en Niza y serpenteando a través de las montañas hacia el norte.

La nueva etapa mantendrá los primeros 89 km del recorrido inicialmente previsto, pasando por la Côte de Gattiéres de categoría 2 antes de desviarse del recorrido previsto para pasar por el puerto de Saint-Martin La Colmiane de categoría 1 y terminar en la estación de esquí de Auron a 1.614 metros. .

Las previsiones de la estación de Auron prevén hasta 10 cm de nieve entre el viernes y el sábado.

La nueva llegada en Madone d’Utelle tendrá una longitud de 15,3 km y una media del 5,7% y se producirá al final de una etapa de 104 km. Si bien la etapa es mucho más corta, la subida es más larga que las dos subidas principales anteriores: la ascensión a Colmiane de 7,5 km y la ascensión a Auron de 7,3 km combinadas.

La Madone d’Utelle se utilizó una vez para una etapa de la París-Niza en 2016. Geraint Thomas tomó la delantera en la subida y la mantuvo hasta la meta al día siguiente.