Problemas de lujo en el equipo puntero: Vollering y Kopecky se enfrentan en el sprint
A primera vista, la segunda etapa del Tour de Romandía Femenina fue un gran día para SD Worx-Protime: Demi Vollering consiguió el doblete y se impuso por delante de Lotte Kopecky, que es la nueva líder de la general de cara a la última etapa del domingo. Sin embargo, la tarea de gestionar los programas de carrera y los caracteres de las dos estrellas se está volviendo cada vez más difícil, ya que solo quedan unos meses para que Vollering deje el equipo.
“No lo sé. Es una situación extraña porque voy a dejar el equipo, así que espero que mi equipo sea neutral al respecto. Ya veremos mañana”, dijo Vollering cuando se le preguntó sobre los planes para la etapa 3. Luego pidió al entrevistador que confirmara que Kopecky estaba por delante de ella en la general antes de continuar: “Probablemente irán a por ella”.
En situaciones como ésta, los ciclistas suelen utilizar el pronombre “nosotros” para referirse al equipo. Es posible, incluso probable, que Vollering se refiriera a los directores deportivos, Danny Stam y Anna van der Breggen, que toman las decisiones sobre las tácticas del equipo, pero la conmovedora frase no dejó de suscitar dudas.
Cuando otros equipos consiguen un doblete, sus ciclistas suelen cruzar la línea de meta celebrando juntos, pero Vollering y Kopecky se enfrentaron en un sprint para conseguir la victoria, y no por primera vez. En la Strade Bianche de 2023, lucharon por la victoria entre ellos en los últimos 400 metros por las estrechas calles de Siena después de alcanzar y dejar atrás a Kristen Faulkner. Entonces, como ahora, Vollering ganó el sprint.
La salida de Vollering a finales de 2024 se anunció durante la temporada de primavera, y en las carreras por etapas que siguieron, el equipo fue criticado por no apoyar a su líder de la clasificación general tan bien como podría haberlo hecho, tanto en la Vuelta Femenina (que ganó Vollering) como en el Tour de France Femmes (que Vollering perdió por cuatro segundos después de perder tiempo tras un accidente en la etapa 5).
“Nuestro plan era hacer que los demás equipos salieran y que intentaran dejarnos atrás. Lo intentaron, pero no lo consiguieron. Al final, quedaron cinco ciclistas, tres de ellas de nuestro equipo. Niamh Fisher-Black fue la primera en atacar, lo intentó de nuevo y luego Realini tomó la iniciativa. Demi contraatacó y luego Lotte se abrió paso. Al final, Lotte y Demi fueron las únicas que quedaron”, explicó Stam sobre el plan que el equipo había elaborado antes de la etapa.
El Tour de Romandía Femenina es una de las carreras en las que la UCI está poniendo a prueba el funcionamiento de las carreras si a los equipos no se les permite utilizar la comunicación por radio entre las corredoras y los directores deportivos. Esto significa que no se puede tomar ninguna decisión en el coche del equipo sobre quién debe ganar la etapa.
Como señaló Vollering, dos corredores del mismo equipo compitiendo uno contra el otro traerá el resultado más justo, pero combinado con incidentes pasados, pinta un retrato de una relación que pronto terminará y que puede no ser adversa como tal, pero tampoco es tan amistosa.