La glucosa es el alimento que le da energía a la mayoría de células del cuerpo. La glucemia es la cantidad de glucosa en la sangre, por lo tanto de ella depende que los músculos y los demás órganos funcionen correctamente y le permitan al ciclista llegar a la meta sin tener problemas físicos. Conozca más sobre glucemia y ciclismo.
Hipoglucemia
El proceso consiste en volver parte de la glucosa consumida en glucógeno el cual va al hígado y al músculo esquelético para ser liberados cuando los niveles de azúcar disminuyan. Cuando la cantidad de azúcar en la sangre es baja, el cuerpo sufre lo que se conoce como hipoglucemia o hipoglicemia y pude producir perdida del conocimiento. Debido a que durante una montada el ciclista no tiene el equipo para medir el nivel de azúcar, debe tener en cuenta los siguientes síntomas para controlarlo: nerviosismo, temblor en las manos, polifagia (hambre insaciable) confusión, cefalea y mareos.
Es algo parecido a una conocida “pálida”. Cuando esto ocurra se recomienda comer productos ricos en azúcar. Y para evitarlo, el ciclista debe alimentarse con cantidades pequeñas de azúcar o líquidos como bebidas hidratantes que le den la cantidad de carbohidratos necesarios para mantener el equilibrio.
Hiperglucemia
Otra irregularidad con la glicemia es la Hiperglucemia o nivel elevado de glucosa en la sangre, este no es tan recurrente en los ciclistas, sin embargo se deben tener en cuenta ya que puede indicar problemas en el metabolismo. Los principales síntomas son: orinar con mayor frecuencia de lo normal, aumento injustificado de la sed, visión borrosa, fatiga y dolor de cabeza, dificultad para respirar. Cuando se presenten estos síntomas se debe consultar al médico.
Los médicos recomiendan una alimentación balanceada, no consumir carbohidratos en exceso cuando se esté montando y, en caso de presentar los síntomas de la hipoglucemia, consumir gradualmente azúcar y agua hasta recuperarse. No consumir alcohol antes ni durante el ejercicio ya que esto trastorna el hígado encargado de metabolizar el azúcar.
El control glicémico depende de la buena alimentación antes, durante y después del ejercicio. En caso de sentir dolor de cabeza o debilidad durante los recorridos lo mejor es consultar a un deportólogo y a un nutricionista para que indique una dieta adecuada.