El especialista
Hablamos con Esteban Zuluaga, quien a sus 27 años es un corredor de downhill y enduro reconocido nacionalmente. Esteban se especializó en el downhill durante varios años; sin embargo, cuando el enduro cobró más relevancia en el país, empezó a alternar su participación en ambas modalidades. A la fecha, ha sido reconocido como Campeón Nacional Categoría Senior y Campeón Nacional de la Copa Downhill. En 2018, ocupó el cuarto puesto en la Copa Nacional de Downhill y en 2015 logró ser Subcampeón Elite en la misma competencia.
En cuanto al enduro, ha logrado ocupar el tercer y cuarto puesto en la Copa Nacional Enduro, durante los dos últimos años.
Esteban, más conocido como “El Poodle”, lleva seis años destacándose como el mejor corredor de Cundinamarca y, actualmente, corre por el departamento de Boyacá, aunque es oriundo de Manizales. Desde muy pequeño, ha estado rodeado de bicicletas y, gracias a sus amigos y al apoyo de sus padres, siempre pudo practicar las modalidades del MTB.
Manos a la obra
Las suspensiones son un asunto que lo apasiona. Dice que del buen estado de ellas depende que el ciclomontañista disfrute su salida en bicicleta. Y es que la suspensión está diseñada para trabajar al 100 por ciento. Para lograr esto, la configuración debe ser la adecuada.
El 90 por ciento de una bicicleta es el marco y su durabilidad dependerá del buen funcionamiento de las suspensiones. ¿Entonces, para qué configuramos las suspensiones? Para disfrutar al máximo la bicicleta en cualquier terreno.
La configuración de cada suspensión depende de la experiencia y la trayectoria del corredor. Se recomienda probar diferentes terrenos, suspensiones y configuraciones, a fin de desarrollar experiencia en el ciclomontañismo.
Según Esteban, los recorridos que se deben tener en cuenta para cada una de las modalidades son las siguientes:
Es importante aclarar que cada ajuste de las suspensiones depende de la habilidad de cada corredor y de la modalidad que practica. De ahí la importancia de reconocer las pistas donde se harán los entrenamientos o competencias.
En el momento de reconocimiento, lo primero que se debe tener en cuenta es la inclinación de la pista. En ese caso, la suspensión se debe tener dura adelante, para evitar caídas, tener una mejor posición y disfrutar al máximo.
Si la pista es muy plana, las suspensiones se deben poner un poco más duras. Esteban recomienda tener un buen tacto al inicio de probar las suspensiones, a fin de ganar más agarre, comodidad y menos desgaste. Claramente, no se debe llegar al punto de exagerar, ya que si la bicicleta “queda muy blanda” se va a descompensar toda completamente el equilibrio y el desgaste físico del corredor será mayor.
En las pistas urbanas, se recomienda poner las suspensiones más duras que en terreno natural, no solo porque el terreno es de asfalto, sino porque los golpes son muchos más fuertes que en otros terrenos y la bicicleta se lleva más a fondo. De lo contrario, el cuerpo recibiría todos los impactos y se expondrá a lesiones. Si el terreno es muy inclinado, rápido y con escalones, la experiencia en carreras de este tipo será determinante.
Para que las suspensiones funcionen adecuadamente
Las suspensiones de una bicicleta MTB se caracterizan por la amortiguación que realizan. Esto se debe al rebote y a las compresiones.
Rebote
Llamamos rebote al hecho de que una suspensión vuelva a su posición inicial después de recibir un impacto, sea rápido o lento. Un rebote rápido dará como resultado una mala adherencia de las llantas al terreno, ya que la suspensión transmite energía, provocando un efecto flotante continúo que disminuirá el agarre. Si el rebote es lento, la suspensión se puede volver demasiado lenta. Como resultado, cada impacto que reciba perderá capacidad de absorción, hasta el punto en que no se recupere el recorrido para seguir absorbiendo. Es muy importante tener un rebote ni muy rápido ni muy lento, que deje fluir a la bicicleta.
Compresiones
Las compresiones son la capacidad que tiene la suspensión para regular la velocidad de entrada de las botellas durante el impacto. Esta se puede regular en impactos de alta y de baja velocidad.
Si la velocidad de entrada es de comprensión baja, la sensibilidad de la bicicleta será baja, lo que mantendrá la adherencia de las llantas en el piso.
Si la velocidad de la compresión es alta, al momento de los rebotes, la sensibilidad de la bicicleta se incrementará, lo que no permitirá hacer topes, bajar escaleras o realizar maniobras de alto impacto.
“En realidad, las pistas son muy largas, así que, prácticamente, es en el cuarto obstáculo cuando se termina de cuadrar bien la suspensión. De hecho, en la copa del mundo, muchos equipos están usando la tecnología de telemetría –durante varias bajas de entrenamiento– para que, al final del día de entrenamiento o de clasificación, se pueda tener la mejor configuración de las suspensiones”, concluye Esteban Zuluaga.